Estas pequeñas baldosas de piedra natural tienen una superficie sin pulir y bordes pulidos, lo que las hace ligeramente redondeadas. Como material natural, pueden presentar diferentes tonalidades dentro de un mismo color, incluso en cada piedra individual. Esto produce un efecto hermoso y recrea el ambiente de los antiguos mosaicos griegos y romanos. La forma tradicional de reducir el mármol es con un martillo y un cincel, pero estas piedrecitas son lo suficientemente delgadas como para cortarse con una tenaza de ruedas. Ten en cuenta que las ruedas pueden desgastarse más rápidamente al cortar. Para realzar y proteger los colores de la piedra natural, puedes usar cera para piedra o aceite de linaza. Esto intensificará los colores y sellará la superficie de las baldosas, manteniéndolas bonitas por más tiempo. Las dimensiones compactas ofrecen muchas posibilidades para crear hermosos diseños de mosaico que reflejan la apariencia clásica de la piedra natural. Deja volar tu creatividad y añade un toque de historia y belleza a tu trabajo de mosaico con este material natural único.
El color que ve en la foto es el resultado después de tratar el mármol con aceite de linaza.
